Estudi PAM

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Rehabilitar una casa antigua de pueblo para convertirla en nuestro estudio de arquitectura ha sido uno de los proyectos más personales. Con unos cambios la hemos convertido en un espacio de trabajo acogedor, donde la luz y los materiales cálidos son los principales protagonistas.

La vivienda que se rehabilita seguía el esquema típico de “cases a una mà” (casas a una mano) de la huerta valenciana. Se trata de un volumen compacto con cubierta inclinada a dos aguas, seguida de una ampliación con cubierta plana. Tras la reforma la planta baja se dedica a nuestra oficina de arquitectura con una zona de trabajo, un espacio de reuniones, una zona de descanso con cocina y una zona de exposición de materia/taller de maquetas. Mientras que la planta primera y segunda se destina una vivienda y archivo.

La creación de un espacio diáfano que mostrara la antigüedad de la edificación y la adaptara a las nuevas necesidades era uno de los puntos de partida del proyecto. Para conseguir los diferentes grados de intimidad y privacidad se crean unos filtros con diferentes sistemas de puertas que van definiendo los diferentes usos.

El contraste entre los elementos nuevos y los restaurados quedan presentes en todos los espacios. Durante el proceso de reforma se conservan los muros y se muestra su materialidad en algunos puntos. También se descubren los techos altos originales que estuvieron ocultos durante décadas y también se recuperan los pavimentos hidráulicos originales de la vivienda.